Por:
Elizabeth Romo.
elizacs98@hotmail.com
Día a día vemos a hombres y mujeres caminando en las calles buscando su diario vivir, a menudo nos encontramos con jóvenes que se transportan en bicicleta, en moto, dirigiéndose al trabajo o al estudio, muchas mujeres que van rumbo a la escuela llevando de la mano a sus niños, muchos padres de familia rebuscando en las calles de la ciudad un trabajo para poder cubrir sus necesidades básicas, pero nadie sabe que sucede tras la vida de cada persona, cada persona tiene una historia oculta y muchas de esas historias cumplen un papel tan importante para la sociedad que NO deberían ser ocultas, pero preferimos tomarlo como algo muy personal y permitir que las injusticias sigan aumentando cada vez nuestro país.
Cada hombre, mujer, niño, niña, anciano, anciana, etc. Que vemos a diario oculta una historia y cada persona una historia diferente y muchas de esas historias parten de raíz del núcleo familiar, constantemente escucho a las personas preguntarse ¿Por qué hay tanta violencia?, y guardan la esperanza de que llegue un buen presidente que traiga consigo la paz para el país, o que ocurra un milagrito para que disminuya la violencia y los jóvenes tomen conciencia y un buen camino, pero se han preguntado así mismo alguna vez ¿Qué hecho yo, para disminuir la violencia?.
Cuenta la señora Maria Lucía Rivera, líder de la comuna 18 en Cali: “En mi comuna se ve mucha violencia en las familias y esto induce a los jóvenes a buscar una salida en la drogadicción y si una personas que no pertenece al núcleo familiar, denuncia el maltrato otro miembro de las misma familia retira la denuncia justificando de mil maneras los maltratos fiscos es muy difícil que el padre acepte la violencia intrafamiliar como un problema, pero el niño, lo vive, lo siente, y lo repite de generación en generación”.
En casa nuestros padres nos dicen lo que debemos hacer para ser unas “personas de bien”, y muchos de esos padres actúan en contradicción de lo que dicen usando la violencia física o el maltrato psicológico como recurso necesario para imponer normas y leyes de lo que se debe o no se debe hacer dentro de la familia lanzando a sus hijos al vació olvidando que necesitan ser escuchados, orientados y a la vez evadiendo la importancia de la situación y cuando ya se ven en un callejón sin salida, guardan la esperanza de que ocurra un milagrito para que el hijo reaccione, o que el vecino, el abuelo, el tío y hasta el psicólogo le de una solución a sus problemas.
Queremos vivir en un mundo de fantasía, en donde todo es bello, creer que la felicidad es forrarnos en dinero, tener los equipos de última tecnología, estar a la moda y matando tiempo criticando siempre al vecino que llega tarde a la casa, a la estilista que recibe muchas visitas de muchachos, a la señora que maltrata de palabras a su hijo. Y dejando por ultimo a la familia, enseñándole a ese niño o a esa niña como debe ser cuando crezca.
Año tras año, vienen ocurriendo diferentes hechos de violencia intrafamiliar a nivel mundial, en nuestro país, aun se ven historias aterradoras de mujeres que han sido victimas del maltrato físico y que desde muy pequeñas han sido programadas para “aguantar” ya que vivir solas corren el riesgo de ser rechazadas para un trabajo o ser señaladas como inútiles por no tener un nivel intelectual o será más bien el temor que les causa sentirse desprotegidas ya que suelen elegir a un hombre con ciertas características como por ejemplo que sean seguros de si mismos; en Cali, existen muchas fundaciones, campañas que apoyan a la mujer enseñándole a la vez que debe denunciar el maltrato físico, se brindan asesoría gratuita para que conozcan sus derechos como mujer y además cuentan con otros beneficios como ayudas para la educación y vivienda, pero… ¿el hombre que papel, cumple?. En una entrevista con Ana Ortiz quien fue victima de violencia intrafamiliar se caso a los 16 años, soportando por muchos años el maltrato dijo: “mi vida fue muy triste y muy dolorosa por culpa de ese marido que tuve que era una porquería, él me decía que yo era vagabunda, prostituta…”, Ana aun guarda rencor en su interior, divulgando por aquí y por allá su triste vida, enseñándole a sus nietas a defenderse de un hombre, porque para ella los todos los hombres son iguales… ¿será esto una opinión solo de Ana? O ¿será que muchas mujeres comparten su concepto?, El hombre a sido excluido de estas campañas y ayudas que le ofrecen a la mujer, porque creemos que ellos son los causantes de la violencia acaso ¿hay un problema de discriminación hacia el hombre?, el psicólogo Carlos Andrés Moreno opina. “la gente cree y le parece muy chistoso cuando se habla de hombres maltratados un que hayan muchos hombres victimas de violencia intrafamiliar y culturalmente el hombre se siente ridículo porque a nivel de genero se lo ha construido para que sea el macho, el fuerte y que no muestre su debilidad y ocultar sus sentimiento. Nosotros no siempre deberíamos hacer campañas para la mujer porque seguimos responsabilizando a la mujer de todo, ¿donde están las campañas para los hombres para ser unos buenos padres, para ser un buen hijos?, ¿de que manera estamos educando al hombre de su rol como pareja?”.
De ninguna manera se justifica la violencia contra las mujeres, los hombres , los niños, ancianos por eso antes de hablar del vecino que llega tarde a casa, de la estilista que la visitan los muchachos cada cinco minutos, del país donde el presidente es un corrupto, donde toda la gente es injusta, deberíamos concentrarnos más y más en nuestra familia, dejar ese mundo materialista en el que hemos creado e inquietarnos por construir una nueva generación llena de valores para inducir al joven más en el ser que por el tener ayudando así que ese milagrito que estamos esperando se convierta en un hecho.
Elizabeth Romo.
elizacs98@hotmail.com
Día a día vemos a hombres y mujeres caminando en las calles buscando su diario vivir, a menudo nos encontramos con jóvenes que se transportan en bicicleta, en moto, dirigiéndose al trabajo o al estudio, muchas mujeres que van rumbo a la escuela llevando de la mano a sus niños, muchos padres de familia rebuscando en las calles de la ciudad un trabajo para poder cubrir sus necesidades básicas, pero nadie sabe que sucede tras la vida de cada persona, cada persona tiene una historia oculta y muchas de esas historias cumplen un papel tan importante para la sociedad que NO deberían ser ocultas, pero preferimos tomarlo como algo muy personal y permitir que las injusticias sigan aumentando cada vez nuestro país.
Cada hombre, mujer, niño, niña, anciano, anciana, etc. Que vemos a diario oculta una historia y cada persona una historia diferente y muchas de esas historias parten de raíz del núcleo familiar, constantemente escucho a las personas preguntarse ¿Por qué hay tanta violencia?, y guardan la esperanza de que llegue un buen presidente que traiga consigo la paz para el país, o que ocurra un milagrito para que disminuya la violencia y los jóvenes tomen conciencia y un buen camino, pero se han preguntado así mismo alguna vez ¿Qué hecho yo, para disminuir la violencia?.
Cuenta la señora Maria Lucía Rivera, líder de la comuna 18 en Cali: “En mi comuna se ve mucha violencia en las familias y esto induce a los jóvenes a buscar una salida en la drogadicción y si una personas que no pertenece al núcleo familiar, denuncia el maltrato otro miembro de las misma familia retira la denuncia justificando de mil maneras los maltratos fiscos es muy difícil que el padre acepte la violencia intrafamiliar como un problema, pero el niño, lo vive, lo siente, y lo repite de generación en generación”.
En casa nuestros padres nos dicen lo que debemos hacer para ser unas “personas de bien”, y muchos de esos padres actúan en contradicción de lo que dicen usando la violencia física o el maltrato psicológico como recurso necesario para imponer normas y leyes de lo que se debe o no se debe hacer dentro de la familia lanzando a sus hijos al vació olvidando que necesitan ser escuchados, orientados y a la vez evadiendo la importancia de la situación y cuando ya se ven en un callejón sin salida, guardan la esperanza de que ocurra un milagrito para que el hijo reaccione, o que el vecino, el abuelo, el tío y hasta el psicólogo le de una solución a sus problemas.
Queremos vivir en un mundo de fantasía, en donde todo es bello, creer que la felicidad es forrarnos en dinero, tener los equipos de última tecnología, estar a la moda y matando tiempo criticando siempre al vecino que llega tarde a la casa, a la estilista que recibe muchas visitas de muchachos, a la señora que maltrata de palabras a su hijo. Y dejando por ultimo a la familia, enseñándole a ese niño o a esa niña como debe ser cuando crezca.
Año tras año, vienen ocurriendo diferentes hechos de violencia intrafamiliar a nivel mundial, en nuestro país, aun se ven historias aterradoras de mujeres que han sido victimas del maltrato físico y que desde muy pequeñas han sido programadas para “aguantar” ya que vivir solas corren el riesgo de ser rechazadas para un trabajo o ser señaladas como inútiles por no tener un nivel intelectual o será más bien el temor que les causa sentirse desprotegidas ya que suelen elegir a un hombre con ciertas características como por ejemplo que sean seguros de si mismos; en Cali, existen muchas fundaciones, campañas que apoyan a la mujer enseñándole a la vez que debe denunciar el maltrato físico, se brindan asesoría gratuita para que conozcan sus derechos como mujer y además cuentan con otros beneficios como ayudas para la educación y vivienda, pero… ¿el hombre que papel, cumple?. En una entrevista con Ana Ortiz quien fue victima de violencia intrafamiliar se caso a los 16 años, soportando por muchos años el maltrato dijo: “mi vida fue muy triste y muy dolorosa por culpa de ese marido que tuve que era una porquería, él me decía que yo era vagabunda, prostituta…”, Ana aun guarda rencor en su interior, divulgando por aquí y por allá su triste vida, enseñándole a sus nietas a defenderse de un hombre, porque para ella los todos los hombres son iguales… ¿será esto una opinión solo de Ana? O ¿será que muchas mujeres comparten su concepto?, El hombre a sido excluido de estas campañas y ayudas que le ofrecen a la mujer, porque creemos que ellos son los causantes de la violencia acaso ¿hay un problema de discriminación hacia el hombre?, el psicólogo Carlos Andrés Moreno opina. “la gente cree y le parece muy chistoso cuando se habla de hombres maltratados un que hayan muchos hombres victimas de violencia intrafamiliar y culturalmente el hombre se siente ridículo porque a nivel de genero se lo ha construido para que sea el macho, el fuerte y que no muestre su debilidad y ocultar sus sentimiento. Nosotros no siempre deberíamos hacer campañas para la mujer porque seguimos responsabilizando a la mujer de todo, ¿donde están las campañas para los hombres para ser unos buenos padres, para ser un buen hijos?, ¿de que manera estamos educando al hombre de su rol como pareja?”.
De ninguna manera se justifica la violencia contra las mujeres, los hombres , los niños, ancianos por eso antes de hablar del vecino que llega tarde a casa, de la estilista que la visitan los muchachos cada cinco minutos, del país donde el presidente es un corrupto, donde toda la gente es injusta, deberíamos concentrarnos más y más en nuestra familia, dejar ese mundo materialista en el que hemos creado e inquietarnos por construir una nueva generación llena de valores para inducir al joven más en el ser que por el tener ayudando así que ese milagrito que estamos esperando se convierta en un hecho.
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